21 de julio de 2009

La guardiana (Historia)

Prólogo:
Al igual que nacen portadores de la llave-espada, nacen guardianas, la misión de la guardiana es proteger al portador de la llave mientras el portador aprende a usar la llave-espada, también una de las misiones de la guardiana es entregarles poco a poco la luz que late en el corazón de las guardianas, el proceso termina con la muerte de la guardiana que a su tiempo es una liberación para las guardianas.
A las guardianas reconoce por un extraño tatuaje en la espalda, el tatuaje tiene forma de una llave-espada rodeada de dos alas protectoras.

Capitulo 1: Un nacimiento, dos destinos.
Los reyes de Vergel Radiante tuvieron una hija, estaba destinada a ser la princesa, pero cuando los médicos y la comadrona vieron el tatuaje en la espalda de la recién nacida, no sabían como decirles a los padres que la niña no podría ser la princesa que tanto anhelaba el reino. La niña se llamo Nimue.

Capitulo 2: La maestra.
No habían pasado ni dos días, desde que se hizo pública, que la que todos creían que sería la princesa, tendría que ser la futura guardiana, cuando apareció una dama vestida de blanco, que se presento como la maestra de la futura guardiana, los reyes aceptaron que la maestra se hiciera cargo de la educación de Nimue, pero no entendían como podía empezarse el entrenamiento con un bebe de 4 días.

Capitulo 3: El entrenamiento de la guardiana.
Nimue empezó a aprender artes curativas por todos los medios a la tierna edad de los tres años, después a los 5 años empezaron a enseñarle magia, a los 7 años le enseñaron artes marciales, y de los 11 a los 16 años le enseñaron a manejar cualquier tipo de arma.
La formación de la guardiana término a los 16 años, justo cuando nació su hermana pequeña y futura princesa Kairi.
Capitulo 4: Un bautizo un intento de asesinato fallido.
El día en que se celebro el bautizo de Kairi, alguien intento matar a Kairi y a su madre, Nimue se interpuso entre la bala y ellas.

Capitulo 5: Inconciencia y reflexiones.

Nimue se despertó… Estaba sola, aunque en la butaca de al lado persistía una leve arruga , al poner la mano notó que estaba caliente, era obvio que alguien se había pasado tiempo allí. Se percató de que estaba viva, era extraño según sus cálculos tendría que estar muerta. Entonces alguien entró en la habitación, no hizo falta que levantara la cabeza para darse cuenta de quien era:
- lo siento maestra...
-Fue una estupidez. Dijo la maestra.
-Ya lo se... Contestó nimue con un leve hilo de voz.
-¿Que pretendías? No, ya se que pretendías, aparte de salvar a tu hermana, pretendías morir, ¿cierto? Dijo levantando una ceja.
-No se lo que pretendía...
-Ya hablaremos luego, ahora será mejor que descanses. dijo dando media vuelta y se marcho dando un portazo.

Capitulo 6: Ataque de rebeldía.
Pasaron dos semanas de recuperación, nimue tuvo tiempo para pensar en su existencia, sus pasos estaban marcados en una sola regla muy estricta “no salir del castillo sola”. Nunca le había dado importancia, total esta fase de su vida seria irrelevante para el futuro, pero tenia curiosidad por saber que era la libertad.

Capitulo 7: Escapadas.
se miró en el espejo, y no se vio a ella, vio a otra chica, era castaña, ojos marrones, no le había costado mucho cambiar de aspecto dado las habilidades mágicas en el campo del camuflaje. Pero sabia que salir no le iba a ser tan fácil, la maestra no estaba, pero eso no le iba a facilitar las cosas.
Calculo todas las vías de escape, eran pocas, opto por la ventana del pasillo norte, ya que sabia que no estaba transitado a esas horas. Cojio una de sus armas, se posó sus guantes. Y saltó hasta el muro. Al fin estaba fuera.

Capitulo 8: Identidad falsa, dulce libertad.
Paseo por las calles, no le importaba a donde se dirigía, la cuestión era alejarse del castillo y de las calles que lo rodeaban, no le costo mucho alejarse. Se le pasó rápido el día, no se dio cuenta y se encontró medio perdida en uno de los peores barrios de la ciudad por la una de la madrugada…
No encontraba ningún punto de referencia, se apoyo en una esquina intentando visualizar la salida, sintió una presencia, no era como las normales emanaba un tipo de magia especial. Ignoro esa presencia y volvió a buscar la salida, al fin la encontró.
se dirigió hacia la salida cuando se topó con una niña, estaba llorando, intentaba usar su magia para sanar unas plantas marchitas, se dio cuenta de que la había descubierto y ya sabia quien era yo, esos ojos podían ver mas allá de lo que cualquier ojo humano podía hacerlo.
- Tú eres la guardiana…¿verdad?
- Y tú no eres humana del todo ¿verdad?
- Me llamo Aerith.
- Yo soy Nimue, pero no le digas a nadie que he estado aquí. Mientras decía esto se quitó uno de sus guantes y con un poco de magia curativa sanó las flores.
- Nimue, me enseñaras ha hacer eso…? preguntó con curiosidad
- Claro, pero mejor llámame Aysel, vamos te lo enseñare mientras te llevo a tu casa, ¿vale?
- Vale.
Capitulo 9: Una emboscada y un héroe…
Mientras llevaba a Aerith a su casa, a unas dos calles de donde se encontraban. Sintió la presencia de unos cuantos individuos rodeándolas, como si fueran una simple presa al fin.
Redujo el paso, preparándose concienzudamente para no desatar mas poder de lo necesario sobre aquellos miserables, lentamente cojio su arma, una lanza-nunchako con una puta triple, una de sus mejores armas.
Eran 6 hombres, olían a alcohol y no parecían muy capaces de mantenerse en pie, pero las opiniones de la joven guerrera eran equivocadas ya que cuando cerraron el circulo estaban bastante serenos. Se fijó en el que parecía el líder, no le paso desapercibida el arma que llevaba, una espada muy básica, bien afilada pero mellada por el uso .
- Bien pequeñas, dadnos vuestro dinero y no os pasara nada. dijo el jefe de la banda con una mirada agresiva y con una voz turbia.
- ¿Que pasara si no lo hacemos? Respondió ella, valientemente.
- Miren esta cría, se nos pone chula. dijo un esbirro a carcajada limpia
- Aerith quédate quieta un segundo. Le pidió mientras le ponía un campo de fuerza para protegerla mientras ella luchaba.
- Miren si nos las vemos ante una maga de tres al cuarto. dijo el jefe de manera burlesca.

Empezó la lucha, no tenía nada que ver con las elegantes fintas de sus maestros, pero si tenían fuerza como para burlar sus estocadas y movimientos, la dura batalla se prolongaba, estocada tras estocada, acometida tras acometida Aysel se cansaba… ya no podía mas, definitivamente la herida de bala le había hecho mucho mas daño de lo que ella creía.
No podía dejar que la vencieran ya que eso provocaría que el campo de fuerza que rodeaba a Aerith perdería la fuerza hasta desvanecerse, a parte de un duro varapalo a su orgullo y honor . Tuvo que esquivar unos cuantos golpes de las porras, palos y cadenas de esos brutos, al fin vio que la única posible salida seria usar mas poder sobre ellos, al final observó una debilidad entre los cuatro mas jóvenes o inexpertos del grupo, fue bastante fácil ya que les tenia medio acorralados, les desarmó en un momento y del miedo salieron despavoridos callejón abajo. Pero se distrajo un breve momento para comprobar que Aerith estaba bien, fue su perdición, uno de los bandidos se acercó por la espalda y la golpeó a traición con su porra, Aysel cayo medio noqueada al suelo, se le nublaba la vista...de los 6 bandidos solo quedaban 3 para su desgracia uno de ellos era el líder un hombre robusto y fuerte. Se acerco riéndose al lado de la joven, y desenvainando su arma dijo:
-Este es tu fin preciosa...
Aysel veía en la sombra de su adversario como se le acercaba su hora y ella no podía hacer nada...y con una suave brisa notó como la espada de su rival se conducía asta ella, de pronto sonó un fuerte estallido metálico y de pronto el silencio...Aysel abrió los ojos, estaba viva , ¿porqué? se preguntó, ¿que había pasado? levantó su cabeza y ahí estaba el, alto, con una espada enorme, no le pudo ver bien el rostro pero parecía atractivo:
-Quien eres? dijo el líder
-No necesitas saber mi nombre, simplemente, morirás.
Tiro al líder y a los otros 2, ayudo a levantar a Aysel, se miraron a los ojos y lucharon los dos juntos contra los otros, mandoble tras mandoble, Aysel recobró el aliento enfrentándose sola al líder:
-Segundo asalto cabrón. dijo Aysel
Mientras el chico misterioso blandía su enrome espada contra los otros 2 esbirros, entre los dos guerreros se ayudaban mutuamente, después de un golpe lo asestaba el otro, dando uso de espectaculares combinaciones de combate y técnicas sorprendentes, al ver tan asombroso espectáculo no les quedó otro remedio a los tres bandidos de rendirse y salir corriendo suplicando que se les perdonase la vida era una victoria bien merecida. Tras la batalla los dos guerreros se miraron...
Capitulo 10: Presentaciones.
- esto...gracias por salvarme...Es lo único con sentido que se le ocurrió en ese momento.
- No importa..., ¿que hacías tu en estos callejones? Dijo con una voz fría y distante.
- Es que...me acababa de perder acompañando a esta niña pequeña...cuando aparecieron esos tipos. Dijo en su defensa.
- ¿No sabes que en estos callejones hay bandas callejeras?
- No...por cierto me llamo Aysel, ¿y tú? Dijo con la esperanza de cambiar de tema.
- Cloud...
-Mm...¿me estabas siguiendo?
-No, pasaba por aquí, nada mas...oye estas sangrando...estas bien?
- Bueno no es nada grave. dijo intentando mentir, pero lo cierto es que le dolía mucho y no pensaba que el hechizo de cambiar de apariencia le pudiera cansar tanto.
- Mientes muy mal.
-No te estoy mintiendo...dijo justo antes de desmayarse.
Esas palabras fueron las últimas que recordó de esa noche.

Capitulo 11: Preguntas y respuestas.
se despertó, en una cama desconocida.
- Al fin despiertas. Dijo una voz
- ¿Donde estoy? ¿y donde esta la niña? Quiso saber mientras intentaba levantarse pero él no me lo permitió.
- De momento a salvo, le dije a la pequeña que se fuera a su casa.
¿como pudiste luchar con semejante herida?
- ¿Como lo sabes? Preguntó horrorizada.
- Empezaste a sangrar un poco cuando te llevaba en brazos hacia aquí.
- Bueno....si, me dispararon, pero pasó hace bastante tiempo... ¿que hora es? preguntó algo mareada
- Son las 4 de la madrugada.
- ¿Donde estamos?
- En una iglesia abandonada…
- ¿Porque me recogiste?
- No suelo dejar un trabajo a medias, ya que te salve de aquellos hombres no te iba a dejar allí para que te encontraran otras bandas callejeras... Dijo el.
- ¿Quien eres?
- Diríamos que una especie de mercenario...
- ¿No eres un poco joven para ese trabajo? ¿Que quieres de mi?
- Quien eres?.
- Ya te dije mi nombre.
- Si, pero eso no es todo.
- Me vas a retener en contra de mi voluntad?
- Podría, pero seguro que alguien preguntara por ti. Aysel...que nombre tan extraño...
- ¿Como estas tan seguro de que preguntarían por mi?
- Por una joven siempre preguntan. Además te he visto en acción, no me creo que no te intentaras escapar de algún sitio...
- Pues si tan claro lo tienes, ¿porque no me dejas marchar?
- Eres libre de irte, yo no te estoy reteniendo, si no te he dejado levantar era para que no te volvieras a desmayar.
- Vale, ¿me puedes sacar de este laberinto de calles?
- Bueno si quieres... Dijo mientras la cogía en brazos.
- Suéltame, puedo sola.
- Ya, claro... Pero como vas a salir de aquí?
- Vale, me rindo, llévame en brazos, pero me dejas en cuanto lleguemos a la plaza del castillo. Era imposible resistirse a esos ojos.
- Tendrás que agarrarte.
- ¿Vamos a ir por los tejados? Dijo con una sonrisa burleta.
- Si.
- Pues entonces, suéltame.
- Tienes miedo, ¿crees que te voy a soltar?
- No, pero me apetece saltar un rato.
- Vale entonces sígueme.
Saltaron un buen rato de tejado en tejado, hasta que vieron la plaza del castillo, bajaron por un muro bajo.
- Parece que ha llegado la hora de despedirnos Aysel.
- Si...adiós Cloud ha sido un placer conocerte.
- Espera
- ¿Que quieres?
- No te vuelvas a meter en problemas, no siempre tendrás la suerte de esta noche.
- Tranquilo no suelo meterme en problemas. Una pregunta ¿que hacías tú en ese callejón?
- Tenía asuntos pendientes con esos tipos con los que estabas luchando.
- Vamos que te hice un favor, te di la oportunidad perfecta para darles una paliza.
- Bueno ya tenía bastantes motivos para darles esa paliza. ¿Por cierto donde te vas a alojar?
- Tengo casa. dijo girándose algo molesta
- Vale, pues vete antes de que te metas en más problemas.
-¿Nos volveremos a ver? Preguntó .
Esperaba una de sus extrañas respuestas, cuando se giró ya no estaba, solo pareció ver una sombra saltar los tejados. Se esperó un rato asta que estuvo segura de que no podía ver hacia donde se dirigía, solo entonces emprendió el camino al castillo.

Capitulo 12: Sueños y consecuencias.
Llegó a su habitación, rápidamente anuló el hechizo de apariencia, escondió las ropas y se tomo un baño relajante antes de acostarse.
Soñé con Cloud y esos ojos penetrantes.
Se despertó, seguía estando cansada, aun no se le habían pasado los efectos de haber estado gastando magia todo el día.

Capitulo 13: 2 vidas.
Ella sabia que estaba jugando a un juego peligroso pero solo por eso era más excitante, el día siguiente se le izo muy largo, su rutina era tan aburrida que cuando se termino se retiro a sus aposentos, cambio otra vez de apariencia y volvo a ser Aysel.
Volvió a usar la ventana del pasillo norte para salir del castillo.
Fue de tejado en tejado hasta donde más o menos había estado con Cloud.
Pero no consiguió encontrar la iglesia abandonada. Entonces le oyó no muy lejos, se tuvo que concentrar un momento para identificar de donde venia su voz. Estaba cerca, ya casi podía verle, entonces se planteó que hacia ella allí, que hacia ella, la princesa Nimue fuera del castillo para ir detrás de un joven.
Era difícil por un lado estaba tan cerca de el y por otro sabia que le estaba mintiendo descaradamente, Aysel no existía realmente, por otro lado seria cruel y doloroso para ambos que existiera amistad o alguna cosa mas ya que ella marcharía en cuanto el portador de llave despertara.
Sabía que no tendría más vida después de su misión como guardiana, porque simplemente moriría. Estaba apunto de marcharse a casa cuando oyó que la llamaban.
- Aysel, ¿que haces aquí? Dijo Cloud.
- Venia a agradecerte lo de ayer...
- Ya te dije que no importaba, me dijiste que no te meterías en más problemas...
- Se cuidarme sola! Dijo enfadada mientras se iba corriendo. Cloud intento detenerla pero no lo consiguió.
- ¿Aysel?
Se giró solo para verle una vez más, la última vez no podía seguir viéndole mas. No asta que fuera capaz de asimilar su condición de guardiana.


Capitulo 13: Asimilación.
Corrió, ya no le importaba nada, mientras corría notó que le dolía mucho el pecho justo donde le había dado la bala, pero siguió corriendo, notó que perdía fuerza, deshizo el hechizo de apariencia para que no le consumiera mas energía. Cerró los ojos un instante, no se dio cuenta de que había una separación entre dos edificios y cayó al vacío. Perdí la conciencia.
- ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Aysel!!!!!!!!!!!!!!. Grito Cloud.

Capitulo 14: Paz.
Paz…
Era posible que su espíritu tuviera algo de paz, en aquella calma, no quería que la despertaran, se estaba demasiado bien, por una vez en su vida, creía que no tenia unas cadenas del destino, creía que podría escapar. Si eso era la muerte, era demasiado buena.
Capitulo 15: absurda realidad.

De pronto noto como tiraban de ella, la arrastraban lejos de ese sitio de paz, intentó resistirse, pero las cadenas la volvieron a atrapar, como si quisieran quitarle lo único que quería, mi paz.
- Aysel, tienes que despertar, no quiero que te rindas. Dijo Cloud.
- ¿Que le ha pasado? Dijo una voz desconocida
- Se ha caído, creo que se ha golpeado la cabeza.
- Parece cansada, ¿sabes si ha estado usando mucha magia?
- No lo se, pero cuándo salio corriendo durante un instante pareció otra persona, pero cuando la encontré en el suelo volvía a ser ella.
- Por suerte parece que solo esta inconciente, no parece tener ninguna herida grabe. Se despertara dentro de un rato.
- Gracias Cid. Dijo Cloud.
- No hay de que, pero no la molestes mucho cuando despierte. Dijo Cid.
- Descuida. Contesto Cloud.
Aun resonaban sus palabras “no quiero que te rindas”. Era parecida a las que le decía la maestra cuando estaba apunto de rendirse en alguna lucha, cuando lo decía ella la enfurecía, dicho por el sonaba mejor.

Capitulo 16: Buenos días, Aysel.
Abrió los ojos lentamente, primero no veía nada, después la imagen se nítido, lo primero que vio fue la cara de Cloud.
- Buenos días, Aysel. Dijo Cloud
- ¿Que me ha pasado? Quiso saber.
- Te caíste desde más de 20 metros, ¿en que pensabas?
- Me despiste. Dije
- No puedes tener esa clase de despistes, podrías morir!!. Dijo el.
- ¿Que hora es?
- Esta apunto de amanecer.
- Me tengo que ir.
- No, no te iras de aquí, no estas en condiciones de ir saltando tejados.
- Tengo que irme, no pueden notar mi ausencia.
- ¿Donde vives? Si tanto insistes en que te tienes que ir, te llevare yo.
- Déjame marchar, no me puedes retener.
Entonces entro alguien en la habitación.
- Por lo que veo, ya se ha despertado. Dijo Cid
- ¿Donde estoy?
- Cloud, todavía no la has orientado, por cierto me llamo Cid.
- Encantada, yo soy Aysel. Me tengo que ir de aquí.
- Cloud, deja que se marche.
- Esta bien, pero antes promete que no te meterás en mas problemas.
- Ahora mismo, como no llegue a tiempo voy a estar en un serio problema.
- Vamos, te acompañare hasta tu casa.
- Puedo ir sola.
- Será mejor que te acompañe.
- Vale...si insistes...acompáñame.
Estaban en una especie de almacén, parecía mas acogedor que la iglesia de el primer día.
- Adiós Cid, ha sido un placer conocerte.
- Lo mismo digo Aysel.
- Aysel vamos ¿si quieres vamos en moto? Dijo Cloud.
- Vale. Cuando vio la moto de Cloud, se sorprendió, era idéntica a una de sus antiguas motos. Mientras se pasaba el casco, se fijo que Cloud estaba raro.
- ¿Cloud?
- ¿Dime?
- ¿Como es que siempre me salvas?
- Porqué pareces tan frágil... como si un dolor eterno te consumiera por dentro...Sube que si no llegaremos tarde.
- Vale.
Cloud iba muy rápido, lo que le obligo a cogerse a su cintura.
- ¿No es genial sentir el aire en la cara a esta velocidad? Dijo Cloud medio riendo.
- Que gracioso eres Cloud.
- ¿No te gusta?
- Si, es genial.
- Sabía que te gustaría Aysel.
- Tú sabes mucho de mi, ¿verdad?
- Hombre para conocerte desde hace 2 días se bastante sobre ti, te gusta meterte en problemas, que cambias de apariencia...
- ¿Como sabes lo del cambio de apariencia?
- A propósito...Aysel no existe, ¿verdad? Aysel se dio cuenta de que habían salido de la ciudad. Ya no iban tan rápido. Pararon en un acantilado, la vista era preciosa.
- Cloud, ¿como lo sabes?
- Mientras estabas inconciente te fallo el hechizo, solo fue un instante pero te vi.
- No era mi intención engañarte, pero…
- Además esta mañana se comentaba que había desaparecido una chica.

Capitulo 17: ¿Algún día te lo podré contar?
- Cloud, te prometo que algún día te lo contare, pero ahora me tengo que ir.
- Vale, pero no te metas en más líos, Aysel.
- Ya estoy en uno...
- Si, porque te dan por secuestrada.
- Bueno, entonces esta claro de que no hablaban de mi, además tu no encajarías en el perfil de secuestrador.
- No se yo...Es tarde, será mejor que volvamos.
- Vale. dijo Aysel volviendo a subirse otra vez a la moto.
- Esta vez si quieres vamos más despacio.
- No, me gusta la velocidad.
- En ese caso...agarrate!
- Ya contada con ello.
- Te dejare tan cerca como pueda de la plaza.
- Vale.
No hablaron más durante el viaje, pero de vez en cuándo aceleraba, lo que la obligaba a cogerse más fuerte, estaba segura de que Cloud lo hacia a propósito.
- Fin del trayecto, Aysel.
- Gracias Cloud. dijo mientras bajaba de la moto mientras se estaba alejando, la volvió a llamar.
- Aysel…
- Dime
- Si te metes en problemas, avísame vale? Dijo mientras me tiraba un colgante.
- ¿Que es esto?
- Digamos que si llevas puesto esto sabré como estas.
- Vale, pero a cambio quiero saber si tu estarás bien, espera un momento. se concentro un instante e hizo un duplicado y lo mejoro un poco.
- Este es el tuyo.
- ¿Me tengo que poner el colgante?
- No, mientras lo lleves encima, sabré si estas bien.
Capitulo 18: Interrogatorio.
Tuvo que dar un rodeo largísimo para estar segura de que Cloud no le siguiera. Llego a sus aposentos, noto que en el castillo no se habían percatado de su ausencia, pero podía ser solo aparente. Ella sabía que la maestra había notado su ausencia. Se concentro un instante y sintió a Cloud al otro lado, lejos de su percepción pero gracias al amuleto estarían juntos. Fue reconfortante. Sabia lo que le esperaba, la maestra no iba a dejar pasar ese asunto.
- ¿Nimue? Dijo una voz autoritaria.
- Hola maestra... Dijo con un suspiro.
- ¿Donde estabas? Continúo con voz ligeramente amenazadora.
- Salí del castillo...a caminar...
- No sabes que no puedes salir! porque me estas desobedeciendo? Su voz estaba adquiriendo un tono cada vez más amenazador.
La joven se posó en guardia, protegiendo su mente de la maestra, sabia que si la maestra encontraba el menor recuerdo de los dos últimos días, incluso si descubría algún pequeño indicio de que se estaba revelando contra su destino.
- Se que hice mal...pero entiende que aquí me ahogo.
- Me estas mintiendo! me ocultas alguna cosa! no eres la misma que eras antes de interceptar aquella bala...
- La gente cambia...tu misma me lo dijiste.
- Las guardianas tienen que ser fieles a su destino, sino como esperas que el portador confié en ti?
- Yo no elegí este destino! dijo desafiándola.
No le dio tiempo a reaccionar, la maestra la golpeo. Se arrepintió de no haberse quitado el colgante de Cloud, si la pelea se alargaba mucho Cloud pensaría que estaba en problemas y vendría en su ayuda, por nada del mundo iba a dejar que la maestra viera el colgante, que por suerte estaba escondido bajo la ropa.
La maestra intentaba acceder a los recuerdos mientras luchaban, aprovechaba cada distracción para dañar las defensas de la joven guerrera, era doloroso y la maestra lo sabía.
De repente el colgante irradio energía, se extraño pero poco a poco se la fue transmitiendo a Nimue, la maestra no pareció darse cuenta, pero la golpeo tan fuerte que salio disparada contra el ventanal de la habitación, rompiendo el cristal, empezando a caer...
Nimue no podía dejar que la maestra descubriera el colgante, antes de que cayera al suelo realizó un hechizo de teletransporte, basto un segundo, todo pasaba muy rápido, la maestra no iba a dejar que se escapara y la siguió. Se teletransportaron lejos, volvieron a caer con los trozos de cristal de la ventana, no importaba lo que pasaba alrededor solo importaba la lucha, la maestra saco sus armas, casi no le dio tiempo a reaccionar saco las suyas.
Podía ser una lucha eterna, maestra contra discípula. Mientras todo esto pasaba, Cloud había notado que Nimue estaba en peligro, corrió al rescate.

Capitulo 19: Lucha de cristal.
La maestra seguía intentando acceder a los recuerdos de la joven guerrera, pero no lo iba a conseguir, aunque eso significara que tendría que dejarla inconciente o lo que era peor, matarla. No pensó, si la ganaba seria por un poderoso milagro. Consiguió rozarle en uno de sus extraños amuletos, que se rompió en el acto, sus restos se esparcieron entre las flores blancas. Lucharon durante un largo tiempo sin que ninguna tuviera una clara opción de ganar sobre la otra, entonces Nimue noto que Cloud estaba cerca, no lo pensó, mientras daba un giro hacia atrás se transformó en Aysel transformando así también su arma, después de esquivar un golpe brutal de la maestra, creó un campo de protección, pues seria lo único que podría salvar a Cloud de la brutal lucha. En una de sus volteretas vio a Cloud eso le dio fuerzas, tenia que ganar, empezó a golpear con mas fuerza.
- Suficiente...dijo la maestra mientras estaba siendo acorralada contra un árbol.
- ¿Que quieres...? Seguramente fue un error, pero no se lo planteó en ese momento. De repente, por desgracia, vio como la maestra hacia un gesto con la mano, de repente, todos los cristales de la ventana se lanzaron contra Aysel. La maestra no paro asta ver que cayó al suelo, aprovechando para bloquear todos los recuerdos.
Capitulo 20: Jaula de cristal.
La maestra le había bloqueado todos los recuerdos, no sabia quien era ni nada de su vida anterior, había aparcado todos los recuerdos y personalidad en un rincón de su mente lo había sellado todo, nunca sabrá porque lo hizo.
Capitulo 21: Lo que Cloud vio.
Cloud llego a ver como Aysel casi gana a la maestra, vio la trampa que esta ultima le tendió, cuando los trozos de cristal impactaron contra Aysel, vio como Aysel caía entre un mar de cristales y como la maestra le tocaba la frente antes de irse. Vio como al irse la maestra, la cúpula protectora que la separaba de Aysel se desvanecía. Corrió hacia Aysel como en un sueño, todo era demasiado surrealista. Llego hasta ella, Aysel estaba llena de golpes, cortes y algunas heridas que no pintaban demasiado bien, Cloud sabia que no sobreviviría a un viaje si la llevaba andando. Se dedico, a irle quitando, con toda la delicadeza posible los cristales enredados en su pelo, los que se habían adherido a la ropa de Aysel, y finalmente la cogio en brazos para apartarla de ese mar de cristales, gotas de la sangre de Aysel le gotearon por la chaqueta hasta llegar a las manos de Cloud, que al darse cuenta se dio cuenta de que era el fin de Aysel.

Capitulo 22: Un gato guía bajo la lluvia.
Cloud se estaba dando cuenta de que haber ido solo, sin el móvil, sin avisar a nadie había sido un gran error.
Estaba empezando a llover y Cloud se refugio bajo un gran árbol, la respiración de Aysel cada vez era mas pausada y lenta, la gotas de sangre empezaban a desminuir, pero Aysel estaba cada vez mas pálida.
Ya casi no respiraba, empezaba a estar fría al tacto, Cloud le poso su capa por encima para que no se enfriara. Aysel se moría y Cloud no podía evitarlo, le hacia falta un milagro.
De repente Cloud empezó a ver unas pequeñas luces aproximándose, eran como salidos de la nada, Cloud sin creerlo vio como las luces se aproximaban hacia ellos, cuando las tuvo mas cerca se dio cuenta de que pertenecían a un gato, el gato se paro delante de ellos, un breve momento y después se dio la vuelta y empezó a volver por la misma dirección Cloud como en medio de un sueño recogió delicadamente a Aysel y tapándola con su capa para que no se mojara, se poso a seguir al gato, que parecía guiarle hacia algún lugar desconocido, nunca nadie se podrá imaginar lo duro que se le izo a Cloud esa caminata, cuando llego a lo que parecía ser un pequeño templo, se aseguro de que Aysel respirara y justo después de eso cayo en un profundo sueño.

Capitulo 23: Un nuevo despertar.
Sonaba una música suave y dulce, olía a incienso, lejos se oía un cántico, sabia que estaba viva pero en cambio no sabía quien era, como se llamaba. Todas estas preguntas le estaban atacando de golpe.
Abrió los ojos, despacio pues tenia el cuerpo rígido y le dolían mucho los brazos, bueno en general le dolía todo el cuerpo, sabia que tenia que despertar, estaba en una habitación modesta, no había gran cosa aparte de la cama y un pequeño altar con unas varillas de incienso, al lado de la cama encontró unas prendas de ropa blanca, parecían una especie de túnica, se las posó ya que la ropa que llevaba estaba llena de cortes.
Había pasado ya una hora y no venia nadie, decidió que ya que nadie aparecía, ir a investigar por su cuenta, de su antigua ropa solo llevaba un colgante, al salir al pasillo se dio cuenta de que habían varias habitaciones, el colgante se puso a brillar y parecía querer que entrara en una de las habitaciones que tenia enfrente, después de un rato dudando se decidió a entrar.
La habitación era igual que la suya, salvo que en un rincón reposaban una larga espada y una capa rojiza, en la cama tumbado había un chico un poco mas mayor que ella, parecía estar medio muerto, por algún motivo no quería que muriera se sentó a su lado y extendió las manos hacia su rostro, concentrando su energía hacia el.
Ya llevaba un buen rato transfiriendo energía a ese joven, cuando oyó unos leves pasos, Aysel se puso algo nerviosa, no sabia que pasaba, entonces entro ella. Era una anciana, de largo pelo blanco, y ojos dulces.
- Veo que ya se ha despertado, ¿como se llama joven?
- No lo se, no se quien soy...dijo algo desorientada
- Tranquila, suele pasar tras haber perdido tanta sangre.
- ¿Porque estoy aquí?
- El chico de esa habitación. Fue el quien te trajo aquí, en medio de una tormenta, estabas inconciente. Dijo mirando la habitación de donde acababan de salir.
- ¿El puede saber quien soy?
- Posiblemente.
Aysel se quedó pensativa.
- Vamos a los baños termales, así podrás quitarte los restos de sangre.
- Vale.
Después de los baños termales Aysel ya aseada y renovada, se dirigió hacia su habitación cuando casi se choca con Cloud. Cloud que la estaba buscando y no se esperaba encontrarla viva, la abrazo y murmurándole al oído.
- Perdóname Aysel...te dije que te protegería y casi te matan...lo siento...no se proteger a nadie...dijo con una voz apenada
- No digas eso...por cierto...¿sabes quien soy? ¿sabes como me llamo?
Cloud se quedo sorprendido, Entonces llego la sacerdotisa, se paro sorprendida al vernos.
- Veo que los dos estáis recuperados del todo, me alegro mucho.
- ¿Quien es usted? Pregunto Cloud.
- Me llamo Yinia y soy la sacerdotisa de este templo.
- ¿Que le han hecho a Ayshel? ¿Por qué no recuerda nada?
- ¿Así se llama? Cuando llegasteis inconcientes los dos y en cuanto despertó ya no recordaba nada. Además en el estado que llego es una suerte que este viva. Dijo Yinia.
- ¿Hay alguna forma de que recuerde algo? Pregunto Cloud.
- No lo se, lo extraño es que solo a olvidado su identidad y todo lo relacionado, en cambio eso no parece haberla afectado a los conocimientos. Dijo Yinia.
Estaban hablando de mi, estaban hablando de mi pérdida de memoria.
- Aysel, ¿no puedes recordar nada de nada? ¿Sabes quien soy?
- ¿Me llamo Aysel?
- Si.
- ¿Y tú quien eres? ¿de que me conoces?
- ¿No te acuerdas de nada? soy Cloud.
- Tranquila Aysel, seguro que pronto lo recordaras todo. Dijo Yinia.
- Además seguro que alguien la buscara, aunque también podríamos ir a los archivos...con ese nombre tan poco común será fácil encontrarte. dijo Cloud.
- ¿Cloud de que conoces a Aysel? Pregunto Yinia.
- Nos conocimos hace cuatro días, ella se metió en problemas… Contesto Cloud.
- ¿Y tienes alguna idea de quien le hizo todos esos cortes? Dijo Yinia.
- Aysel y una especie de hechicera luchaban...Aysel la hubiera ganado si no hubiera sido tan clemente, entonces la hechicera le lanzo una lluvia de cristales, acto seguido Aysel se desplomo en el suelo, la hechicera le toco la frente y se marcho. Contesto Cloud.
- Cloud, ¿la persona que le hizo eso casi la mata y cuando ya la tenia vulnerable se dedico a simplemente tocarle la frente? no tiene sentido! Opino Yinia.
- ¿Al tocarle la frente podría haberle borrado la memoria? Pregunto Cloud.
- Yo no soy una hechicera, pero seguramente si tuviera mucho poder, podría ser. Dijo Yinia.
Se quedaron pensativos.
- Cloud si la llevaras al sitio donde ocurrieron los hechos, posiblemente recordara alguna cosa.
- Podría dar resultado. Pero no recuerdo el camino, ya que hasta aquí nos guió un gato...
- Ah! el gato guía, no importa el os volverá a mostrar el camino.
- ¿Aysel quieres ir? Dijo Cloud.
- Si con eso recuerdo, vale.
- Aysel puede resultar doloroso para ti, no será agradable recordar lo que te paso en ese prado. Añadió Yinia.
- No importa, vamos.

Capitulo 24: El prado de cristal.
Después de andar un rato siguiendo al gato guía, llegaron al prado de flores blancas, a Cloud no le hizo mucha gracia volver.
El prado no era demasiado grande, tenía un pequeño lago en el lindero del bosque y un gran sauce llorón reposando sus largas ramas en la superficie del lago.
Todo parecía normal, demasiado tranquilo. Corrió hacia el centro, sentía una fuerza extraña que la arrastraba hasta allí, Cloud estaba nervioso, como si fuera a pasar algo extraño. Al llegar vio como las flores estaban un poco marchitas y algunas tenían manchas rojas, al llegar notó una presencia desagradable. Cloud se había alejado, estaba bajo el árbol.
Estaba a punto de irse a donde estaba Cloud, cuando encontró una cuenta de cristal, al cogerla le invadió una sensación muy desagradable, dolorosa como si se le clavaran cristales en la piel. Se lo quedó, ya que era eso lo que estaba provocando que se marchitara el prado, contenía energía maligna. Sintió un gran peso, era como si estuviera cargada de energía, tenia que liberarla, se apoyó en el suelo del prado y liberó toda la energía, el prado la absorbía sin mas y de golpe los cristales salieron despedidos y se transformaron en diminutas mariposas de cristal. Cloud que estaba contemplando a Aysel se quedo sorprendido, cuando una de las pequeñas mariposas se poso en su hombro noto que seguían siendo de cristal, entonces se fijo en Aysel seguía transfiriendo energía pero mas suave algunas mariposas se habían posado en sus cabellos castaños y sobre la túnica blanca, parecía iluminada con una suave luz blanca, podría haber pasado como una ninfa de cuento. Entonces callo en la cuenta, Aysel debía ser una hechicera poderosa, ¿pero quien la había atacado? Estaba oscureciendo y empezaba ha hacer frió, Aysel no parecía notarlo cada vez resplandecía mas, como una estrella, las mariposas de cristal se iban posando en la flores cercanas a Aysel. Entonces Aysel brillo con mucha intensidad, entonces se fue apagando hasta que solo quedo un leve resplandor y una chispa de luz en sus ojos, parecía cansada pero feliz, Cloud pensó que esa nueva Aysel era mas alegre, y sus ojos ya no tenían aquella onda de pena.
- Aysel, nos tenemos que ir.
- Vale. dijo con una sonrisa
- Ven. dijo Cloud extendiendo la mano, se la tomó y se posó en pie.
- Mira lo que he encontrado. Dijo mientras le mostraba la cuenta.
- ¿Que es?
- Parece una cuenta, pero eso no es lo que me importa, transmite una energía negativa, como de odio, mucho odio...
- Déjamela.
- Vale, pero al cogerla te dolerá un poco. Se la dio.
- Es como si coges un cristal de hielo, que te quema...es verdad... desprende una energía desagradable.
- Me es familiar, pero nada más. Esa energía la conozco.
No muy lejos de allí, en la ciudad, en una de las torres de magia.
- Ha despertado... Dijo una voz .
- Que pasa Saquios? dijo una voz oscura
-Acabo de detectar un gran torrente de magia a las afueras de la ciudad, ni la guardiana podría superar ese poder, la magia de la vida. Dijo Saquios.
- No es posible, tenemos que encontrar al poseedor o poseedora de esa magia, si se la usara para mal, o se corrompiera...dijo una joven
- Ni lo menciones, reúne a los buscadores, será fácil encontrar ese torrente de energía...Volvió a sonar la voz oscura.
Capitulo 25: La búsqueda de Saquios.
Aysel y Cloud habían llegado al fin al templo, Aysel seguía sin recordar nada, pero parecía preocupada. Se había despedido al llegar al templo, y se había dirigido hacia su habitación. No apareció durante la cena. Cloud le comento a Yinia lo que había pasado en el prado. Incluso le enseño la diminuta mariposa de cristal, que en cuanto tuvo ocasión volvió con Aysel.

En el prado, se veían 7 siluetas, 6 parecían buscar algo de vital importancia. La séptima estaba examinando el centro del prado.
- Se ha ido, ha estado muy cerca. Dijo Saquios.
- Señor, mire las mariposas. Dijo uno de los buscadores.
- Son de cristal, pero tienen vida. Afirmo Saquios.
- Señor todo esto lo ha hecho sin tener consciencia de sus poderes, si por algún motivo se corrompe, podría ser el fin. Dijo el buscador.
- ¿Cuando tardaremos en encontrar al poseedor? Pregunto Saquios.
- Si vuelve a utilizar ese poder o utilizan las mariposas podríamos seguirle la pista. Dijo uno de los buscadores.
- Estupendo, dividíos, quiero que un grupo este atento a si usa este poder aunque sea a baja frecuencia, el otro que empiece a buscar algún rastro de las mariposas, aprisa, no tenemos mucho tiempo. Ordeno Saquios.
- Ahora mismo lo aremos señor! Dijeron los buscadores.

Cloud se fue dormir, pues aun se sentía cansado y quería meditar un rato sobre los poderes que le había mostrado Aysel. Aysel en cambió no podía dormir, así que después de estar una hora intentándolo se rindió, salio sigilosamente de la su habitación y se fue al pequeño jardín del templo. Desenvolvió con cuidado el trozó de cuenta que había hallado en el prado y lo dejo junto a una pequeña flor, los efectos fueron casi inmediatos la flor se marchito al instante y Aysel noto una especie de angustia en el corazón, rápidamente lo volvió a envolver en la tela blanca, tenia que encontrar la forma de destruir o de quitarle esa propiedad a la cuenta, pero por mucho que lo intentara no se destruía. Se pasó pensando todas las formas de destruir la cuenta hasta el alba. Estaba tan absuelta en sus pensamientos que no notó que Cloud estaba detrás de ella, hasta que le toco el hombro delicadamente.
- Aysel, ¿no me digas que has estado aquí toda la noche? Pregunto Cloud.
- No podía dormir...
- ¿Has recordado alguna cosa?
- No. ¿Cloud como nos conocimos? ¿Que relación tengo yo contigo? Preguntó.
- Nos conocimos hace poco, digamos que tienes o tenías la facultad de meterte en problemas o de caerte de alturas considerables... La ultima vez que nos vimos te regale este colgante y tu me hiciste un duplicado, ahora tu tienes uno y yo el otro, gracias al colgante supe que tenias problemas y vine a buscarte. respondió Cloud.
- ¿Entonces te dedicas a salvar a desconocidas?
- Bueno, no exactamente solo tuviste la suerte de que pasara por allí, pero te defiendes bien. Bajo la mirada, como si intentara ocultar algo.
- Es decir...¿nadie sabe quien soy? dijo con una voz melancólica
- Aysel, ahora eso no importa...
- A ti no…
- No puedes seguir así, no se quien eres pero seguramente eres algún tipo de maga o hechicera. Cuando nos conocimos eras diferente, como si alguna cosa te perturbara, lo único que debe preocuparte es la persona que te intento matar.
- ¿Como era?
- Era una mujer...con ropas blancas. Te engaño, parecía que la conocías, entonces bajaste la guardia un instante y ella te lanzo todos los cristales.
- Entonces todo ese odio iba dirigido a mi, ¿verdad?
- Aysel, será mejor que lo olvides. Pero estate alerta y no bajes la guardia, deja que te proteja.
- Cloud… No entiendo nada… Esto no es real…
- Aysel como deje que esto te pasara a ti, me prometí protegerte.
La joven le abrazó, Cloud se quedo sorprendido pero devolvió el abrazo. Se quedaron así un buen rato. se sentía protegida, de pronto sintió otra vez ese odio, no iba dirigido directamente hacia ella, iba hacia cualquiera que intentara quererme o protegerme, Cloud también debió notarlo porque se aparto de mi a gran velocidad como si le quemara, me miro extrañado.
- Cloud, apártate...dijo.
Lanzó el trocito de cuenta y mientras este estaba en el aire, le disparó un gran torrente de energía pero la cuenta se resistió, continuaba sin saber como hacerla desaparecer, pero lo que sabia era que todas las cosas tienen un limite de magia transferible y que si se sobrepasaba ese limite explotaban, ignoraba lo grande que seria la explosión por eso cuando empezó a notar que se acercaba al limite creó un globo de protección alrededor de la cuenta lo suficientemente potente como para resistir la mas fuerte de las explosiones. Ya notaba que el límite estaba cerca, se fue apartando del globo. De pronto el trocito de cuenta exploto, sobrecargado de la propia magia de Ayzel. El globo resistió bastante bien, consiguió retener casi toda la magia, pero eso no evito que la explosión la tirara hacia atrás. En cuanto se levantó vio, que de la cuenta empezó a salir una burbuja. Al fijarse mas vio a dos personas luchando, una de ellas, al dar una voltereta cambio de apariencia, era si misma, seguían luchando hasta que una la tuvo acorralada a la otra contra un árbol, entonces un montón de cristales se lanzaron, la burbuja exploto. Tendió la mano hacia donde había estado la burbuja. Sintió que toda la energía que había empleado seguía allí, la volvió a recuperar. Se fijó que Cloud estaba en el suelo también derribado por la explosión.
- ¿Cloud? ¿estas bien?
No obtuvo respuesta supuso que le había afectado la explosión mas que a sí misma, le transfirió energía curativa.
- Hola de nuevo. dijo con una sonrisa al ver que abría los ojos.
- Aysel, ¿que estabas haciendo?. Lo último que recuerdo ha sido una explosión...
- Ahora descansa... dijo con dulzura. Cloud se quedo dormido al instante. La mariposa de cristal, se poso sobre Aysel.

Capitulo 26: Luz en medio de las tinieblas.
Cloud caminaba, caminaba siguiendo una mariposa, la ruta de esta era extraña y sin sentido, pero Cloud la seguía sin dudar, pero no sabia porque sentía una angustia. Después de seguir a la mariposa y a su ruta caprichosa, cuando a lo lejos vio una luz, pero parecía fría, sin saber porque Cloud se poso a correr como si su vida pendiera de ello. La mariposa pareció brillar de repente como si nada cayo al suelo convertida en un trozo de cristal, el paisaje había dejado de ser un bosque para convertirse en un prado. Allí estaba suspendida en el aire, Aysel mirándole.
- Cloud…
Cloud estaba apunto de echar a correr hacia ella, cuando todos los cristales salieron disparados a Aysel, el prado se volvió grotesco lleno de cristales y sangre, en el medio, el cuerpo destrozado de Aysel, a lo lejos se distinguía una silueta recortada en el horizonte, Cloud se dirigió hacia ella, parecía la silueta de una chica joven, estaba despaldas emanaba una extraña luz violácea. Iba peinada con una larga cola de caballo, en la espalda lucia un extraño tatuaje, pero Cloud no se pudo fijar demasiado porque la chica se giro hacia a el. Tenía los ojos de tonos violáceos y de expresión entre resignada y triste. Parecía que iba a decir algo, pero de repente aparecieron unas cadenas le rodearon las muñecas y se la llevaron. La ultima mirada de la chica fue de resignación. De golpe se escucho una voz muy conocida para Cloud.
- Nunca podrás protegerlos, te arrebataré a todos a los que quieres.
El sueño se volvió borroso, una voz cristalina se lo llevaba lejos de todo ese mal.
- Cloud, solo es una pesadilla.
- Argg
Aplicó algo de magia curativa para relajarle.
- ¿ya estas mejor?
- ¿Aysel?
- Vamos Cloud, solo era un sueño.
- Pero tu…
- He estado aquí contigo todo el tiempo...
- …
- Vamos, será mejor que vayas a comer algo.
- ¿Y tú?
- Oh!, si quieres te hago compañía.
- Vale, ¿pero tú no comes?
- No siento hambre nunca...
- Vas recordando cosas.
-Si…
Fueron al comedor del templo, como era temprano no había casi nadie en él, esperaron a que Cloud eligiera un sitio y se sentó a su lado, Yinia no tardo mucho en aparecer.

Capitulo 27: Los buscadores.
- Señor Saquios.
- Espero que sea importante... Dijo Saquios.
- Creo que tenemos datos sobre el portador o la portadora de la magia de la vida.
- ¿Tenéis alguna identidad?
- Parece ser una chica joven, no parece consciente de sus poderes, eso facilitara la búsqueda ya que si lo fuera no lo utilizaría para estas cosas.
- Bien, ¿algún dato más?
- Pues tenemos motivos para pensar que alguien la ataco.
- ¿Eso provoco que despertara?
- No lo sabemos con seguridad...pero parece que no fue eso.
- ¿Donde esta?
- Hemos enviado a uno de los buscadores a seguir las mariposas, parece que no ha ido demasiado lejos.
- Bien.
Se acerco uno de los buscadores, parecía nervioso, la capucha plateada impedía ver el rostro, parecía querer decir alguna cosa importante pero no sabia como interrumpir a los superiores.
- Habla Ellyllon. Dijo Saquios.
- Mi señor, ya sabemos donde esta. Dijo la buscadora llamada Ellyllon
- Excelente, ¿Ellyllon donde se encuentra?
- Esta en el templo de las lunas.
- ¿Esta acompañada?
- Tenemos motivos para pensar que si.
- ¿Quien es?
- Aun no lo sabemos.
- ¿A que esperáis para descubrirlo?
- Es imposible aproximarse.
- ¿Hay algún problema?
- Desde que nos hemos aproximado al templo hay como una presencia protectora en ella.
- Eso no tendría que ser un impedimento para vosotros...
- Es demasiado poderosa...
- Sois una pandilla de incompetentes...volved a la torre y preparar el círculo. intentad averiguar por donde se la ha visto últimamente, si encontráis el más pequeño indicio, borrad las conexiones.
- Así se ara, mi señor.
Saquios empezó a pensar un plan.
Mientras los buscadores volvían a la torre, Saquios se encamino hacia el templo, aproximándose a una de las ventanas, empezó buscando a la portadora, examinando las mentes de cualquiera a qué estuviera cerca de allí, así dio con Aysel y con Cloud, se paso todo el día observándoles, estudiándoles. Al descubrir que Cloud no sabia casi de nada de Aysel maquino los últimos detalles de su plan.
Capitulo 28: No tendrías que haberla conocido, lo siento.

Los buscadores son seres implacables, nunca han sido gente normal. Todos han tenido un pasado un tanto oscuro, pero Saquios los fue recogiendo, a todos. Ahora se dedican a buscar al poseedor de la magia de la vida, por fin la han encontrado. Ahora solo queda borrar su rastro, una tarea no muy agradable.
- Ellyllon hemos encontrado un rastro.
- Esta bien, terminemos cuando antes.
- Esta en el famoso taller de Cid Hirwind.
- Dejemos los detalles, vosotros volver al circulo ya me ocupare yo de esto.
- ¿Estas segura?
- Claro, no nos retrasemos más, preparar el círculo y la habitación de la portadora.
- De acuerdo, tienes hasta tiempo de sobra para regresar antes que alguien lo eche en falta.
- De acuerdo. Era la parte que menos le gustaba del trabajo, deseó que no opusiera mucha resistencia o que fuera un solitario, no le hacia gracia matar a demasiada gente.

Con el taller delante, primero decidió asegurarse, así que llamó.
- Es este el taller de Cid Hirwind?
- Si, necesita algo en particular.
- Hace poco aquí llego una chica, inconciente, verdad?
- Eso no es asunto suyo señorita...
- ¿esta seguro?
- Absolutamente...Dígame su nombre...
- De acuerdo a cambio déme el nombre de la chica y la relación que con ella guarda. O muera...
- Señorita yo no estaría tan seguro de ello...
- Mi nombre es Ellyllon, déme usted la información y no le pasara nada.
- Señorita Ellyllon, le tengo que pedir que se marche de aquí...
- Hum, será una pena, tanto talento desperdiciado.
No esperó a que le diera tiempo a coger su arma y de reaccionar y le atacó. Casi esquivó el golpe, pero la magia duro lo suficiente como para impulsarle para atrás, aunque debido a su corpulencia no tan atrás como hubiera querido. De repente vio un rallo de fuego que venia directo hacia ella, le dio tiempo a esquivarlo, contraatacó esta vez dio en su objetivo, le dejó tirado en el suelo medio inconciente, iba a darle el golpe de gracia cuando reparó en una foto, salía Cid y una niña pequeña, entonces miró a los ojos al sujeto, al fin y al cabo no sabia casi nada de la portadora. Se acercó seguía mirando con mirada desafiante. Le volvió a lanzar un rayo de energía...seguía conciente. Ya estaba a punto de darle el golpe de gracia cuando…
- No tendrías que haberla conocido, lo siento. Mientras le decía eso le dejó inconciente, por un momento pensó que fue un error dejarle con vida, pero no se arrepintió. No se molestó en mirar el estado del pequeño campo de batalla, se largó sin más, de vuelta a casa…

Capitulo 29: La colección
Yinia estaba meditando cuando una de las novicias entro a comunicarle que un extraño solicitaba su audiencia.
- Haz que pase a la sala del oráculo.
- Ahora mismo.
- Gracias Dalia.
Saquios fue conducido a la gran sala del oráculo, que también servia de sala de reuniones, Yinia ya le esperaba con su habitual serenidad.
- ¿Creo que es usted el que solicitaba la audiencia verdad?
- Si…
- Y si no es indiscreción que quiere, un gran mago, del templo de la luna.
- Estoy buscando a mi hermana…
- Y he de suponer que su hermana se encuentra en este templo?.
- No lo entiende, mi hermana desprende un gran poder, podría ser peligroso tanto para ella como para los que estén cerca, se llama Aysel y si no se estabiliza pronto se podría corromper. Además hay mucha gente codiciando el poder que ella guarda…
- Y bien señor Saquios, como puedo saber que no es usted uno de los que codician ese poder…
- Porque ella me reconocerá…
- Lamento decirle que no lo creo, hace unos pocos días atacaron a su hermana no lejos de aquí, la trajeron bastante herida y cuando despertó no recordaba nada.
- Esta sin memoria, quien la trajo…?
- Un joven, parece que si la conociera…
- Puedo verla?, seguramente es un hechizo de bloqueo, así se sabría quien la ataco.
- No se si debería…
- La tengo que ver, mi hermana es bastante inestable… Se mete en bastantes líos… Pero desde que se despertó el nuevo poder, se fue…
- Ya veo… Are que la llamen, Dalia puedes traer a Aysel?
- Claro.
Mientras tanto…
- Aysel, tendríamos que ir a la ciudad así al menos podríamos averiguar algo sobre ti. Podrías quedarte en mi casa.
- Cloud prefiero no ser una carga para ti, además Yinia me dijo que podía quedarme aquí…
- Pero podría no ser nada bueno para ti, la persona que te ataco podria estar cerca, además podría atacar el templo…
En ese momento llego Dalia.
- Por fin te encuentro Aysel, Yinia me ha pedido que te buscara. Un hombre ha venido a buscarte. Dijo Dalia.
- Ahora voy…
- ¿Puedo ir yo también? Pidió Cloud.
- Supongo que no abra ninguna pega…
Ni Aysel ni Cloud tenían un buen presentimiento sobre la visita, a Aysel le pudo la curiosidad…
- Yinia, ya están aquí Aysel y Cloud.
- Esta bien Dalia, pero solo pedí que viniera Aysel…
- No quería dejarla sola…
- Aysel este es un asunto personal que solo te incumbe a ti, así que la decisión es tuya, ¿quieres que Cloud se quede aquí?
- Esta bien, a mi no me importa que se quede aquí y si el quiere.
- Realmente has perdido la memoria hermanita. Definitivamente eres ella, claro que no conservas ningún recuerdo, ni tu anterior carácter, hasta pondría la mano en el fuego que ya no te metes en tantos líos…
- ¿Quien eres tu? Pregunto Cloud.
- ¿Hermano?
- En efecto Aysel, soy tu hermano. ¿Por cierto, Cloud verdad?
- Si, y usted es?
- Soy Saquios, el hermano de Aysel y señor de la torre de la magia. Tengo que agradecerte que cuidaras de Aysel este tiempo, supongo que te ocasiono algún que otro problema.
- En absoluto.
- Aysel creo que ya ha llegado la hora que vuelvas a casa, tienes a tus amigos muy preocupados, además prefiero que estés a salvo en la torre, Yinia me ha dicho que alguien te ataco y que casi mueres. No es seguro para nadie que te quedes aquí.
- Aysel, creo que tu hermano tiene razón. dijo Yinia
- Vale… Supongo que tenéis razón…
- Claro hermanita.
- ¿Pero podré ver a Cloud?
- Claro, bueno eso si tu hermano no tiene inconvenientes… respondió Cloud
- Aysel mi deber ahora es asegurarme primero de recuperar tus recuerdos, además tienes que seguir tus estudios de magia…
- Pero…
- Cuando estés mejor podrás volver a ver a Cloud y a tus amigos. Venga tenemos muchas cosas que hacer, creo que si no volvemos pronto Ellyllon se preocupará.
- Venga Aysel te ayudare a recoger tus cosas. Dijo Dalia.
- Si… vamos…
- Aysel, ponte esto… Dijo Saquios lanzándome una bolsa.
- ¿Que es esto?
- Ellyllon me dijo que te diera esto, estaba segura de que querrías llevar tu ropa de vuelta.
- Bueno la verdad es que tampoco tienes nada que recoger, así que te espero a que te cambies la ropa y volvemos con tu hermano. Dijo Dalia.
- Vale…
- ¿No estas contenta de volver con tu familia?
- Es raro…
- Debe ser normal, si no recuerdas nada de antes, pero seguramente viendo a tus amigos te iras acordando.
- Claro.
- Bueno te dejo para que te cambies.
- Saquios no quisiera ser entrometido, pero hace unos días cuando conocí a Aysel, por un momento mientras corría cambio de forma, solo un breve momento pero después de eso se desmayo…
- Es normal, quiero decir Aysel tiene la capacidad de transformarse a voluntad propia. Lo que es raro es que desmayara, aunque como seguramente debía haber gastado demasiada magia y con lo inestabilidad que comporta que se despierte un nuevo poder, no es nada grave. Pero gracias por decírmelo.

20 de julio de 2009

Capítulo 30: Una despedida agridulce.

Una vez cambiada de ropa, Aysel bajó a la puerta del templo donde le esperaba Saquios junto a su escolta. Allí también se encontraba Cloud, Dalia y su maestra Yinia, antes de irse Yinia le preguntó:

-Estas segura de esto?
-Si...supongo... respondió con un pequeño hilo de voz
-Aysel...si no quieres ir no vayas... Dijo Cloud.
-Pero es que yo quiero ir...y averiguar algo mas de mi, de mi pasado oculto en mi memoria...

Mientras tanto Saquios atento a la conversación se acercó y con un tono algo autoritario gritó:

-Aysel! vámonos, tenemos prisa.
Aysel asintió con la cabeza, se despidió con la mano de quien la había cuidado esos ultimos dias. Se volvió y empezó a andar junto a su sequito, y unos metros mas adelante, Aysel se paró, se dio media vuelta y en medio de una sonrisa miró a Cloud, el no podia creer que después de tanto pasado juntos acabara de esa manera pero Aysel le dijo cojiendose el colgante:

-Acuerdate...aquí...siempre...
Al oír eso Cloud se relajó un poco, devolviéndole la sonrisa y sujetó con fuerza su colgante, no le quedaba mas remedio que ver como poco a poco como esa chica tan especial para él se alejaba de su lado, posiblemente, para siempre.

Capítulo 31: La torre de magia.

Durante el camino Aysel se mantuvo al margen, callada, inmersa en sus pensamientos, ¿era verdad todo lo que le había contado Saquios?
En mitad del camino Saquios le preguntó:

-En que piensas Aysel? te encuentro muy callada.
-Nada en especial...
-Te preocupa algo?
-No...es simplemente que todo esto es nuevo para mi y no estoy muy segura de nada...
-Tranquila, es normal, pero te e estado reservando esta sorpresa para cuando estuviéramos solos, descúbrete...
Acto seguido una de las personas del sequito se retiró la capucha y dijo:

-Me alegro de verte, Aysel! Vaya me tenias muy preocupada e!, siempre metiéndote en líos! habrás perdido la memoria, pero sigues siendo la misma de siempre...cuantos castigos hemos recibido por hacer travesuras. Dijo de manera muy efusiva
-Eres...Ellyllon?
-Me has recordado!!
-Si...supongo...
-Me tienes que contar todo lo que te a pasado!! Y lo mas importante, quien era ese rubito con el que estabas e pillina...? Dijo en tono burlesco.

Saquios en medio de un carraspeo dijo:

-Estos temas hablarlos en privado por favor...además no la presiones mucho ahora Ellyllon que Aysel estará cansada...

Justo Saquios acabo de decir esa frase que apareció tras un bosque la gran torre de magia, lugar hacia donde se dirigían. El grupo se detuvo, dos de los buscadores que los acompañaban se adelantaron justo delante de los portones de piedra, realizando una serie de símbolos y palabras con sus manos, al finalizar el pequeño ritual, las puertas se abrieron y una voz interna dijo:
-Bienvenida, pequeña Aysel...

Capitulo 32: Sospechas de una conspiración

Desde que Aysel se marchó Cloud estuvo encerrado en su habitación, tumbado en la cama, recordando su ultimo encargo que tuvo como mercenario y todas las aventuras que, a raíz de ahí, conoció a Aysel. Cloud no salía, no comía, la decisión de Aysel le había afectado profundamente, le dolía no tenerla a su lado, entonces en la venta, apareció la mariposa de cristal, su mariposa de cristal, al verla, Cloud se dirigió hacia la ventana, de pronto, la mariposa cayó, Cloud la cogió con la mano y se dio cuenta de que había dejado de ser una mariposa para dar paso a una porción de cristal, con rabia la apretó fuertemente con la mano, dio media vuelta, cogió su arma y dando un fuerte portazo se dirigió hacia la puerta del templo decido a recuperar a esa chica tan especial para el, aunque ello le costase su propia vida, ese sentimiento interior era tan fuerte que no le importaba contra quien tuviera que luchar para conseguirlo.

Pero Cloud no se percató de una presencia en una de las ventanas del templo, era Dalia, la joven ayudante de la sacerdotisa Yinia. Dalia fue corriendo a avisarla:

- Maestra!! Dijo alterada. Cloud se ha ido! Dirección la torre de magia.
-Habrá ido en busca de aquella joven...
-Tenemos que hacer algo! Dijo dandose media vuelta a toda prisa.
-Detente! Grito Yinia con toda su autoridad. Es su decisión, debemos respetarla, ademas estos temas no nos conciernen a nosotras, es un tema de hechiceros y Buscadores, no de Sacerdotisas de las lunas.
-Pero...pero...
-No hay mas que hablar, ve a tu cuarto, duerme y deja de pensar en ello.
-Si...maestra...Dijo mientras cerraba la puerta.
Dalia dio media vuelta y puso rumbo a su habitación.

Capitulo 33: La maldad esta donde menos lo esperas

Mientras Aysel se instalaba en su cuarto, Saquios fue a informar a su jefe, era un hombre robusto, fuerte, algo anciano pero con muchísima experiencia del cual su nombre retumbaba al pronunciarlo, Karl Rudolph.
-Mi señor, hemos cumplido con la misión que se nos encomendó, ella no tiene ni idea de nuestros planes...
-Excelente trabajo Saquios, cuando calculáis que podremos empezar con el ritual de extracción?
-Calculamos que para la próxima luna llena estarán hechos y a punto todos los preparativos...pero es peligroso para la chica...en el proceso habrá que tener cuidado de no matarla y de no extraerle toda su esencia mágica...
-No pasa nada Saquios, ella no tiene importancia, no me importa si muere en el proceso, quiero su totalidad de esa esencia mágica...
-Pero mi lord...no podemos hacer eso! va en contra de nuestros ideales y...
-Silencio! dijo con tal fuerza que retumbó en las paredes. Yo diré lo que es correcto y lo que no!
-Pero mi señor...el plan para salvar el mundo...
-Respecto a eso...han cambiado un poco los planes...ya que no eran exactos del todo...
-hm? a...a que se refiere...?para salvar el mundo hay que erradicar todo mal que habite en él no?
-Cierto, y donde si no habita mas crueldad y maldad en el mundo que en el corazón del ser humano?
-Esta diciendo que pretende eliminar a la raza humana?
-Correcto, eliminare toda la raza humana y solo nosotros, los buscadores, viviremos y expandiremos por el mundo para purificarlo con nuestro dogma sagrado...
-Pero señor...esta equivocado! hay gente buena en este mundo!
-Te equivocas, todo ser humano posee un atisbo de maldad en su corazón, y día a día renuncian a la salvación para complacer un pequeño placer, hay que erradicarlo rápidamente antes de que la humanidad se autodestruya...así los buscadores podremos vivir eternamente siendo el siguiente eslabón en la evolución, nosotros somos el progreso, nosotros...
-Esa no es la idea de salvación que yo tengo mi lord...no puedo permitir que tal atrocidad azote la humanidad...
-Y que pretendes hacer al respecto...?
-Aquello que sea necesario...incluso si tengo que matarle! dijo desenvainando la espada.
Saquios acometió de manera amenazadora contra su maestro, de pronto una fugaz luz atravesó a Saquios, acto seguido un ser oscuro envainaba su espada a espaldas del hechicero...Y una voz imponente retumbó:
-Es muy lento, incluso para morir...Dijo mientras envainaba su espada
-Q...Quien...e...res...? dijo antes de desmayarse
-Buen trabajo, fue un acierto contratarte como mi guardaespaldas...
Era un ser alto, de larga melena plateada y vestido negro, armado con una larga katana.

-Ahora, deshazte del cuerpo...Sephirot.

Capitulo 34: Porque creerte ahora?

Corría y corría, con el fin de encontrarla, solo le movía ese sentimiento de tenerla cerca, guiado por la luz del collar que los unía, Cloud se acercaba cada vez mas y mas a su objetivo. De pronto llego a un denso bosque, se divisaba la torre justo detrás, de pronto sonó algo detrás de un matorral, Cloud se acercó sigilosamente, tendido en el suelo estaba Saquios.
-Saquios? Que haces aquí? Estas malherido!
-Cloud...rápido...no hay tiempo...van a matar a Aysel...
-Como!? dijo alterado. Cuéntame ahora mismo todo lo que a pasado!.
Saquios le explico a Cloud todo lo ocurrido y sus intenciones desde el principio.
-Entonces...si le has mentido a ella, me has mentido a mi y a las sacerdotisas del templo...Porque creerte ahora?
-Porque si esto llega a orejas de Karl Rudolph, que te he contado todos nuestros planes, vendrán a matarme...
-Podría hacerlo yo ahora mismo...porque ganas no me faltan...Dijo Cloud conteniendo su rabia. Aun que viendo el estado en el que te encuentras no tendría gracia que te diera el golpe final...
-Créete lo que quieras, eso no cambiara el hecho de que lo que te e contado es real y que sucederá si no los detenemos...
-Bueno quédate ahí y muere en paz...yo iré a echar un vistazo. Dijo Cloud reanudando la carrera atravesando todo el bosque a toda prisa.
-Espera! Cloud...Dijo antes de desmayarse...

Pocos minutos después Cloud llegó frente al portón, estaba custodiado por unos buscadores, uno a cada lado de esa inmensa mole, Cloud sigilosamente se adentro en unos arbustos cercanos para emboscarles, de pronto oyó una conversación de los 2 guardianes:
-Pobre chica no?
-Porque lo dices?
-No se...una joven así, con un futuro tan prometedor...no te parece mal que tenga q morir?
-Mientras se cumplan nuestros objetivos me da igual quien tenga que morir...
-También es verdad...Mientras se cumplan nuestros planes para erradicar el mal, el fin justifica los medios.
Al oír esto, Cloud dio por cierto que toda la historia que le había contado Saquios era cierta y tenia que hacer lo imposible para evitarlo. De pronto una sombra se le acercó por la espalda y sin hacer el menor ruido le lanzó un dardo anestésico. Cloud poniéndose la mano en el cuello cayo desmayado y una voz femenina dijo:

-Llevadle al calabozo!

Capitulo 35: Raras alianzas.

Ellyllon fue a informar a Saquios a su oficina, pero se encontró con la puerta de la sala abierta y mucha gente dentro, entre ellos Karl Rudolph, se estaban deshaciendo de todo el material de Saquios, libros, material científico, informes...Ellyllon paró la oreja:

-Mi señor, aquí están todos los archivos e informes sobre la extracción de magia que disponía Saquios
-Excelente, seguid recopilando información, buscad una manera alternativa por si tenemos algún fallo o surge algún problema durante el proceso.
-Mi señor, porque mandó eliminar a Saquios?
En ese momento Ellyllon puso mucho mas interés en la conversación y se dijo para sí:
-Mi maestro...¿muerto? imposible...¿porque?
Dentro de la sala seguían hablando.
-Se opuso a nuestros planes de purificación y en esta orden no tienen cabida los traidores...
-Pero si el fue el primero en acceder a realizar el extractor de magia para ese objetivo, como es posible?
-Se negó a eliminar a una jovencita para salvarnos, decía que no era ético...Además tenemos todo lo suficiente para realizar el proyecto nosotros, no le necesitábamos mas que para que lo planteara, total es otra pieza del tablero mas y la joven sin poder mágico es prescindible, además, el resultado será el mismo ya que al acabar el proceso, ella morirá ...
-Pero señor...
-Basta! ya es suficiente, seguid buscando si no queréis correr la misma suerte...
-Si señor! dijeron al unísono
Ellyllon quedó colapsada por la noticia, no supo que hacer ni que pensar, no solo eliminarían a Aysel sino que habían eliminado a la persona que la rescato del infierno que fue su niñez, muchos sentimientos florecieron en la joven, rabia, venganza, ira...Ella compartía el mismo pensamiento de purificación de su maestro y no podía permitir que tal atrocidad azotara el mundo humano, rápidamente pensó en ir a salvar a Aysel y en sacarla de esa torre, ya que sin ella, no podían completar su plan, pero pensó que sola no podría, los buscadores eran demasiados y ella estaba sola, necesitaba alguien que le ayudara ¿podría ser que aquel joven impetuoso que había dejado dormido horas antes le echara una mano? Su objetivo era el mismo, podrían crear una alianza para derribar el mal. Sin pensárselo dos veces fue decidida hacia los calabozos.

Mientras tanto fuera en el bosque, una sombra se acercaba sigilosamente a la torre, un ser encapuchado corría, era Dalia, con intenciones de ayudar a Cloud a rescatar a su joven amiga. Al llegar a la puerta, se percató de la presencia de los guardias, con sus habilidades atléticas y sus técnicas de combate, eliminó uno de los guardias de una manera sigilosa, acto seguido agarro al segundo por el cuello y amablemente le dijo:

-Me abres la puerta? dijo con una voz dulce
-S...s...si...a...ahora...mismo. dijo mientras abría la puerta
-Por cierto, no habrás visto a un chico rubito por aquí?
-S...si Ellyllon se lo a llevado a los calabozos, están detrás de los jardines pasado un camino lleno de pinares! dijo rápidamente.
-Gracias! dijo con una sonrisa.

Una vez la puerta estuvo abierta, noqueó al segundo guardián entrando raudamente percatándose de que nadie había notado su presencia.

Sigilosamente fue adentrándose en la fortaleza, evitando cualquier contacto visual con los buscadores, dirigiéndose a los jardines, de pronto a la entrada del camino del pinar se encontró con un sujeto que tenia intenciones parecidas...

-Quien eres tu? dijo Dalia
-Quien quiere saberlo? dijo Ellyllon
-Soy Dalia, sacerdotisa, tu nombre?
-Ellyllon, asesina.
-Vaya, vaya...a ti te estaba buscando. Dijo situándose en guardia
-Pues...aquí estoy...Respondió sacando sus dagas.

Las dos jóvenes empezaron un combate apasionante, lanzando golpes por doquier. Las dos guerreras estaban muy igualadas, ninguna iba a darse por vencida. De pronto Ellyllon dijo:
-Eres buena.
-Tu también.
-Que hace una sacerdotisa en esta torre?
-Vengo en busca de mis amigos, un chico rubito y una chica.
-Vaya...entonces hablas de Aysel? dijo bajando las armas.
-Si...porque? dijo levantándose del suelo
-Pues...parece que tenemos el mismo objetivo
-Parece que si, sabes donde es?
-Si sígueme.
Las dos pusieron rumbo a las oscuras mazmorras, donde Cloud estaba preso.
Capitulo 36: Nuevas alianzas.

La pareja de jóvenes fueron en busca de ayuda para salvar a Aysel, por eso primero fueron en busca de Cloud, a las oscuras mazmorras de la torre. Cloud estaba pensativo, callado, sentado en un rincón buscando la manera de salir de ahí, de pronto un sonido de pasos se aproximaba a él y con un chasquido de llaves la puerta se abrió, del exterior surgió una voz:

-Cloud? estas ahí?
-Quien es? exclamó con fuerza.
De pronto Dalia bajo las escaleras.
-Soy yo, Dalia, he venido a buscarte.
-Como te lo has echo para llegar esta aquí?
-Pues...con un poco de ayuda... Dijo soltando una sonrisa.
Ellyllon apareció en escena.
-Qué hace ella aquí!? dijo Cloud enfurecido
-Tranquilo, está de nuestra parte.
-Lo dudo mucho...
-Déjalo Dalia, digamos que el y yo tuvimos un encuentro algo fortuito...
-Fuiste tu la que me metió aquí!! dijo Cloud levantándose.
Con furia la cogió del cuello de la tunica.
-Como le haya pasado algo a Aysel por tu culpa...
-Si no nos damos prisa, si que estará en un aprieto...Dijo Ellyllon en tono apremiante.
-Porque tendría que creerte? Desde el principio todo era mentira.
-Cloud, tranquilo, deja q te lo expliquemos, por favor... Dijo Dalia.
Cloud lentamente, soltó a Ellyllon.
-Bien, ya que estás mas tranquilo, salgamos de aquí. Dijo Ellyllon.
-Y Aysel? preguntó Cloud.
-Tranquilo, tenemos tiempo, ven, te lo explicaremos después con mas calma.
-Yo no me voy de aquí sin Aysel.
-Cloud, en serio, vámonos al templo, allí pensemos una buena manera de rescatarla, no querrás ponerla en peligro verdad? si nos descubren ten por seguro que la liquidarán. Dijo Dalia.
-De acuerdo vámonos...Asintió Cloud.
Mientras se dirigían a la salida fueron esquivando varios enemigos vigías gracias a las habilidades de su nueva compañera, ya que ella savia todos y cada uno de los movimientos de los guardas. Una vez en el bosque, Cloud se percató de que el cuerpo de Saquios no estaba. Pensó que se lo habrían comido los animales de la zona y sin darle mas importancia, siguió corriendo tras sus dos acompañantes.

continuara